Por Lic. Jacobo Colon


Intenta sacar un arma de fuego para agredir a un Procurador Fiscal.*

Como un hecho sin precedentes y alarmante debemos describir la agresión verbal y física de un miembro de la Policía Nacional de rango superior a un Procurador Fiscal, lo cual nos coloca como un estado cuasi fallido y donde la constitución y las leyes nos hacen recordar la frase de que la carta magna es “Un pedazo de papel”

El rol que juega la Policía Nacional está reglamentado en la Constitución de la República, estableciendo en su artículo 255 lo siguiente:

“La Policía Nacional es un cuerpo armado, técnico, profesional, de naturaleza policial, bajo la autoridad del Presidente de la República, obediente al poder civil, apartidista y sin facultad, en ningún caso, para deliberar”.

Por eso constituye una vergüenza que un general de brigada no conozca sus funciones y limitaciones y de manera reiterada proceda a violar la constitución que está obligado a defender y obedecer.

El acontecimiento funesto sucedió el día 25 del mes de marzo en el Destacamento de Villa Duarte, en Santo Domingo Este cuando el general Eddy Pérez Peralta, Director Regional, interviene y delibera que el procurador fiscal Nelson Beltré no podía conocer una audiencia y poner en libertad a unas personas acusadas de “violentar el orden público”

 ¿Acaso ignora este general que él carece de facultad deliberativa según el artículo 255 de la constitución?
Sigue expresando el artículo 255, acápite 3 de la constitución cuando expresa: “Perseguir e investigar las infracciones penales, bajo la dirección legal de la autoridad competente”

¿Quién cree este general que es la autoridad competente?

Además de la constitución el Código Procesal Penal en su artículo 88 dice que el Ministerio Público es quien dirige la investigación de los hechos punibles.

¡Dirige la investigación!

Pero además el artículo 93 acápite 1 expresa lo siguiente: El cumplimiento obligatorio por parte de los funcionarios y agentes policiales de todas las ordenes relativas a la investigación de los hechos punibles emitidas por el Ministerio Público o los jueces. La autoridad administrativa policial no debe revocar o modificar la orden emitida ni retardar su cumplimiento. 

Pero el hecho bochornoso de parte de este miembro de la Policía Nacional no se queda ahí, al no ser obedecido en su ilegal, arbitrario e injusto reclamo procede a lanzar una andanada de palabras impublicables en contra de los miembros del Ministerio Público a nivel general, donde la expresión más blanda fue “El Ministerio Público es un……..” refiriéndose a los excremento humanos,  ofendiendo así la dignidad de miles de fiscales del país.
Pero más allá de las ofensas personales y grupales a quienes este “general” está llamado a obedecer según nuestra carta magna, en reiteradas ocasiones intentó sacar su arma de fuego para “Darle un tiro” al fiscal Nelson Beltré. 

Creemos que alguien con el rango de general debe tener el conocimiento de que, si saca su arma de fuego, es para disparar y matar.

Por eso creemos que en su intento de sacar su pistola iba acompañado de la intención de disparar.

Si no es por la rápida intervención de los agentes policiales de puesto en el cuartel de Villa Duarte que pudieron contener su furia, hoy estuviéramos asistiendo al entierro de un fiscal que estaba cumpliendo con un mandato constitucional.

Tiempos que entendíamos superados cuando las botas se imponían a las leyes se asoman por los predios de Santo Domingo Este y talvez en todo el país, el renacer Trujillista se encarna en algunas autoridades para darle vigencia al sátrapa de la dictadura.

Y todo indica que las autoridades policiales son cómplices por acción u omisión al hacer silencio frente a estas acciones del Director Regional Oriental General Eddy Pérez Peralta, porque a pesar de las reiteradas denuncias, no dicen ni hacen nada.

¿Están esperando un hecho horrendo y lamentable para poder reaccionar?

Cuando decimos que estos hechos pueden llegar a ser atroces y trágicos si no se toman los correctivos de lugar, es por los antecedentes que observamos en el comportamiento de este general, el cual siendo coronel fue acusado de agredir un juez en la Provincia Valverde Mao.

¡Llego a agredir a un Juez!
 
Asimismo se tuvo que emitir una orden de arresto en su contra por desconocer y desacatar las órdenes de la Magistrada Procuradora Fiscal Titular de la Provincia de Valverde, Mag. Sonia Espejo, la cual tuvo que auxiliarse del Ejército Nacional para poder realizar sus funciones ante la sublevación de dicho oficial.

 ¡No respeta la autoridad legalmente constituida!

Pero hay denuncias de amenazas de muerte al periodista Maeño Juan José Rodríguez y al Abogado Nelson Ureña, solo con estos datos podemos inferir que el fiscal Nelson Beltré verdaderamente estaba en peligro de muerte frente a una persona irreflexiva e incapaz de someterse a las autoridades que él está llamado a obedecer.

¡Puede que yo sea el próximo amenazado!

En tiempos en que se habla de reforma policial creemos que los miembros de esta institución deben ser entes que cumplan las leyes y se sometan a los dictados de la Constitución de la República, por lo que este tipo de acciones realizadas por el general Eddy Pérez Peralta no encaja en lo que se persigue hacer.

No debe ni puede haber reforma policial mientras existan en el seno de la Policial Nacional hombres y mujeres que no entiendan que vivimos en un estado social y democrático de derechos y que sin importar el rango que ostenten, están llamados a sujetarse a la constitución y a las leyes.